Hoy hace exactamente 54 años que un joven veinteañero llamado David Bowie lanzaba un sencillo de siete pulgadas cuya cara A contenía una canción de evocador título: Space Oddity.

Bowie llevaba algunos años intentando hacer música de manera más o menos seria, e incluso había lanzado un disco de debut, una mezcla de pop y psicodelia que no tuvo gran repercusión.

Inspirado por la película 2001: Una odisea en el espacio, de Stanley Kubrick y, cuenta la leyenda, también por algún viaje psicotrópico, Bowie este single en versión mono que contaba las aventuras del Mayor Tom, un astronauta ficticio que volvería a asomar en el universo musical del artista en diversas ocasiones.

El cantante logró conectar a la perfección con un zeitgeist volcado con todo lo que sonase a espacial. No en vano, tan solo cinco días después, la NASA lanzaría el Apolo XI, que haría posible la llegada del hombre a la Luna.

Bowie entró en las listas de éxitos británicas por primera vez gracias a Space Oddity, que incluso llegó a contar con una versión en italiano, y ello allanó el camino para que la canción volviese a aparecer en su segundo disco, esta vez con la producción de quien sería su productor de cabecera durante toda su carrera, Tony Visconti.

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La segunda versión de Space Oddity dio incluso nombre al disco que la contenía a su llegada a Estados Unidos, y el cambio se extendió de manera definitiva a nivel global. La reedición de la canción en formato maxisingle daría su primer número uno en Reino Unido a David Bowie, que prolongaría la vida de la canción grabando una versión acústica a finales de los setenta.

Bowie llevaría adelante una etapa cósmica durante esa década que dejaría canciones como Life on Mars, Starman o Moonage Daydream, y le llevaría a convertirse en Ziggy Stardust, alter ego acompañado por sus Arañas de Marte.

Space Oddity es universalmente saludada como una de las mejores canciones de David Bowie y, a su vez, como una de las mejores composiciones pop de la historia. En la historia reciente, la versión grabada por el astronauta canadiense Chris Hadfield desde la Estación Espacial Internacional hizo que la composición de Bowie protagonizase el primer videoclip de la historia grabado en el espacio.

Con motivo del cincuenta aniversario de la canción, el 12 de julio de 2019 se publicó una nueva remezcla a cargo de Tony Visconti, además de una plétora de versiones para coleccionista que incluía una réplica del single original.