- El whisky favorito de los expertos en whisky
- Los mejores whiskys de 16 años
- El mejor whisky para tener en casa: cuatro botellas de culto
Aquí vengo con un monumento líquido, y no es ningún recurso estilístico, hipérbole o similar. Estoy escribiendo en sentido literal.
Y es que la administración estadounidense, en 2013, tuvo a bien conceder la distinción de Monumento Histórico Nacional a la destilería Buffalo Trace, cuya primera sede data nada menos que de 1775. Este bourbon está tan metido en la cultura norteamericana que, durante la Ley Seca, fue de los pocos destilados que tenían autorizada, de manera restrictiva eso sí, su venta siempre que fuera con fines medicinales.
Vamos, con este preámbulo os quiero situar dado que no estamos ante cualquier whisky. Una reverencia ante el Kentucky Straight Bourbon Whiskey de Buffalo Trace.
En cuanto al líquido en sí, señalar que se elabora a partir de maíz, centeno y cebada de malta envejecido en barricas de roble durante años para dar ese sabor añejo y de final dulzón propio de los bourbon de Kentucky.
Se puede tomar solo, aunque mi forma favorita es bajo el cóctel “Old Fashioned” mientras te pones una peli basada en una obra de Tennessee Williams y así vivir una USA experience total. Más norteamericano que celebrar “acción de gracias”, ver la Superbowl o comprarse un arma automática en un supermercado.
De nada.