Si te quedas en Madrid o piensas visitar la capital de España en Semana Santa, pero quieres salir un día fuera del bullicio y visitar un pueblo a menos de una hora en coche, tenemos una propuesta que merece mucho la pena y que, además, está casi más bonito cuando llueve.

Te hablamos de Manzanares el Real, un verdadero tesoro medieval en el que brilla con luz propia el Castillo de los Mendoza. Construido en 1475, se alza majestuoso a orillas del embalse de Santillana, rodeado por las montañas de la Sierra de Guadarrama.

Declarado Monumento Histórico-Artístico, fue edificado por la influyente Casa de Mendoza y diseñado por Juan Guas, uno de los máximos representantes del gótico tardío en Castilla y arquitecto de los Reyes Católicos. Este palacio-fortaleza, emblema del gótico isabelino con influencias hispano-musulmanas, combina elementos defensivos medievales con la elegancia renacentista, y en la actualidad alberga un Centro de Interpretación del Medievo y una colección de arte y armaduras.

manzanares el real
Getty Images
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Cuando las gotas de lluvia acarician sus piedras centenarias, el castillo parece susurrar historias de caballeros y damas, intrigas palaciegas y batallas épicas. Desde sus almenas, se vislumbra un paisaje verde y sereno, como si el tiempo se hubiera detenido. El embalse, con sus aguas tranquilas, refleja la majestuosidad de la fortaleza y las montañas circundantes.

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Manuel Breva Colmeiro//Getty Images

Pasear por las estrechas calles de Manzanares el Real es como viajar atrás en el tiempo. Las casas de piedra, las plazas adoquinadas y los soportales evocan una época en la que la vida transcurría más despacio. Por su parte, la Iglesia de Nuestra Señora de las Nieves, que mezcla el románico con el gótico, también nos habla del pujante pasado de este pueblo.

Para los amantes de la buena mesa, Manzanares el Real no defrauda. Cuenta con una buena oferta culinaria, donde podrás degustar platos tradicionales con un toque contemporáneo. Por supuesto, podrás disfrutar con las mejores carnes de la sierra, una buena caldereta de cordero o, si el tiempo está tonto como esta Semana Santa, un buen cocido para entrar en calor.

Así que ya sabes, si estás buscando un pueblo que merezca la pena cerca de Madrid para pasar un día lluvioso de Semana Santa, Manzanares el Real es lo que estás buscando.