8 trucos para que tu smartphone acelere

Lo primero, deshazte de las aplicaciones que no te interesen o no uses. Muchos teléfonos llevan apps de serie que quizá no te interesen y ocupan memoria y capacidad. Ve a los ajustes de tu teléfono y desactívalas sin ningún pudor.

Algo parecido ocurre con la memoria caché. Un smartphone es un ordenador, así que es conveniente que de vez en cuando des un barrido a los archivos temporales que en él se acumulan. Incluso hay apps como ésta que lo harán por ti.

Seguro que te cabrea igual que a nosotros que la pantalla gaste tanta batería. La solución pasa por Screebl, una app que sabrá la posición en la que manejas el teléfono, permitiéndote así ahorrar energía sin tener que preocuparte.

Pero no solo de energía vive el smartphone, también de memoria RAM. Esto quiere decir que te acostumbres a cerrar las apps que no estés usando. Con un gesto de tu dedo hacia un lateral será suficiente para acabar con ellas sin ningún problema.

Otro de los paraísos perdidos del teléfono es el brillo. Nunca sabes si es suficiente o si no alumbra ni tus ojos. Recurre al autobrillo de tu terminal o a Lux, una app que regula de manera más eficiente el brillo del móvil.

Y sí, los archivos que te pasen tus amigos también tienen que acabar eliminados. Olvídate de las descargas automáticas si no quieres que la memoria de tu móvil explote sin darte cuenta. Si aun así persistes, con barrer una vez a la semana será suficiente.

Controlar las notificaciones también te puede ahorrar disgustos, pitidos y, sobre todo, mirar demasiado el móvil. Desactiva las menos importantes o desconecta las laborales cuando no estés trabajando. Nos lo agradecerás.

Y si quieres tener todo el poder del móvil en tu mano en un solo clic, recurre a Tasker. Con esta app podrás crear una pantalla de inicio que de un solo toque te ponga todo lo que quieras a tu alcance. Ahorrándote tiempo, batería y memoria.